Nov, 2021 cuidados de la piel, rutinas de belleza, rutina facial
Tanto si es la primera vez que te pasas por nuestro blog, como si hace tiempo que nos sigues y nos lees, seguro que sabes lo importante que es la limpieza facial diaria.
Y por eso esa es una de las cosas que más nos escucharas cuando vienes a vernos a Ederne, para recibir cualquier de tipo de tratamiento.
¿Por qué? Porque incluir la limpieza facial en tus rutinas diarias es una de las mejores formas de mimar tu piel y de demostrarle lo mucho que te importa, además del consejo más básico para mantenerla lo más bonita y joven posible.
Pues bien, hoy te queremos hablar no solo de la limpieza facial básica que haces por la mañana y por la noche, sino de la doble limpieza facial.
Se trata de una práctica que, como otras muchas rutinas de belleza, viene de Corea, el país de las buenas prácticas de belleza por excelencia.
Tal y como su nombre indica, la doble limpieza se divide en dos partes, pero que no por ello resulta más invasiva y, por tanto, es apta para todo tipo de pieles, siendo lo importante en este sentido, utilizar los productos que mejor se adapten a cada caso.
Si a esta rutina de limpieza facial le añadimos el protector solar y la hidratación correcta para cada piel, está más que demostrado que la piel luce más joven y hermosa por más tiempo.
Aunque hagamos una buena limpieza facial tradicional, está demostrado que es necesario una segunda para que se puedan eliminar todas las impurezas, los residuos y la suciedad.
Con esta doble limpieza conseguimos una limpieza real y profunda, además de eliminar las células muertas y desobstruir poros, tal y como nos explican desde Natura Bissé, la marca por excelencia con la que trabajamos.
Por otro lado, este la doble limpieza facial tiene como ventaja que, gracias a ella, los tratamientos que se aplican después, resultan mucho más efectivos y esto supone un ahorro económico a la larga, además de ayudar a cuidar mejor nuestra piel.
Ya sabes que, como indica su nombre, esta limpieza se hace en dos fases:
Fase uno: aplicar un limpiador de base oleosa para eliminar restos de maquillaje o residuos que se acumulan en la piel. Tras su aplicación en cara y cuello, limpia con agua tibia y pasa al segundo paso.
Paso dos: ahora toca aplicar un limpiador, pero de base acuosa, que será el encargado de eliminar las impurezas que no tengan base grasa, además regular el exceso de sebo en la piel. Aclara con agua tibia y aplica un tónico facial acorde a tu tipo de piel, de manera que este hidrate tu piel y ayude a cerrar los poros de la misma.
Seguro que, con todo lo que te hemos contado hasta ahora, ya sabes que el mejor momento para hacer la doble limpieza facial es por la noche. ¿Por qué? Porque es el momento en el que la piel acumula mayor cantidad de impurezas.
Esto facilitará una adecuada regeneración de la piel por la noche.
Como ya te hemos dicho, en Ederne trabajamos codo con codo con la casa Natura Bissé, sus tratamientos y productos, por lo que para la doble limpieza facial nocturna te recomendamos los siguientes:
Diamond Cocoon Daily Cleanse o Diamond White Rich Luxury Cleanse para la primera fase.
Agua micelar revitalizante C+C Vitamin Micellar Cleansing Water para la segunda
Para terminar, utiliza un tónico como Diamond Luminous Clarity Toning Lotion o NB·Ceutical Tolerance Toner si tienes la piel sensible.
Tienes todos los productos a tu disposición en Ederne, además de poder preguntarnos lo que desees con respecto a la doble limpieza facial. ¡Te esperamos!
