Cambio de primavera a verano, ¿qué tenemos que prevenir?

Abr, 2023 Cuidados de la piel; problemas de la piel; piel saludable; piel sana;

La primavera y el verano son estaciones llenas de color, sol y alegría, pero también pueden tener efectos perjudiciales en nuestra piel. 

El aumento de la temperatura, la humedad y la exposición a los rayos UV pueden provocar diversos problemas dermatológicos, como piel irritada y alérgica, problemas circulatorios, piel enrojecida y sensible, cuero cabelludo irritado y sensible, calor y transpiración excesiva, y cuperosis. 

Para poder prevenirlas, en este artículo, te damos algunos consejos útiles para que tu piel lleve mejor la transición de la primavera al verano.

Piel irritada y alérgica

Uno de los problemas más comunes en la piel durante la transición de la primavera al verano es la irritación y la alergia.

Los cambios bruscos de temperatura y la exposición a los alérgenos presentes en el aire pueden causar una reacción inflamatoria en la piel, que se traduce en picazón, enrojecimiento y erupciones cutáneas.

Para prevenir estos problemas, es importante:

  • Hidratar bien la piel con una crema humectante, preferiblemente con ingredientes naturales.
  • Evitar el uso de productos que contengan fragancias y conservantes artificiales, que pueden desencadenar una reacción alérgica.

Problemas circulatorios

El aumento de la temperatura y la humedad afectan a la circulación sanguínea, especialmente en las piernas, lo que puede causar hinchazón, dolor, piernas cansadas o cosquilleo.

Para prevenir estos problemas, es importante:

  • Hacer ejercicio regularmente
  • Evitar estar de pie o sentado durante mucho tiempo
  • Usar ropa cómoda y suelta.

Además, existen algunos productos que pueden ayudar a mejorar la circulación sanguínea, como: 

  • Cir Linf B8, de BioEspaña, para ayudar a mejorar la circulación intravenosa.
  • Essential Shock Intense Cryo Gel, para las piernas cansadas.
  • Diamond Well-Living The Dry Oil Energizing, para, mediante un masaje, activar la circulación de las piernas. 
Todas ellas, disponibles en Ederne, donde, además, te aconsejamos sobre su uso en tu caso concreto.

Piel enrojecida y sensible

La exposición al sol, el calor y la humedad pueden provocar que la piel se vuelva más sensible y propensa a enrojecerse.

Para prevenir este problema, es importante:

  • Proteger la piel del sol usando cremas con factor de protección solar, como por ejemplo, SPF 50 Extra Smooth High Protection, de Natura Bissé.
  • Evitar la exposición directa al sol durante las horas de mayor intensidad.
  • Mantener la piel hidratada, con cremas como C+C Vitamin SPF 30 Sunscreen Dry Oil.
  • Evitar el uso de productos abrasivos o irritantes, como exfoliantes o tónicos alcohólicos.

Calor y transpiración excesiva

El aumento de la temperatura y la humedad puede provocar sudoración excesiva, especialmente en áreas como las axilas, la espalda y la frente. Esto puede provocar mal olor, irritación y la aparición de manchas en la ropa.

Para prevenir estos problemas, es importante:

  • Usar ropa transpirable
  • Evitar el uso de tejidos sintéticos que puedan retener el sudor y causar irritación.
  • Mantener la piel limpia y seca
  • Usar productos antitranspirantes.

Cuperosis

La cuperosis es una afección de la piel que se caracteriza por la aparición de venas rojas y dilatadas en la cara, el cuello y el pecho.

Esta afección puede agravarse durante la transición de la primavera al verano, debido a la exposición al sol y el aumento de la temperatura.

Para prevenir la cuperosis, es importante:

  • Proteger la piel del sol y evitar el uso de productos que contengan alcohol y otros irritantes. 
  • Mantener la piel hidratada y evitar el consumo de alimentos y bebidas que puedan provocar vasodilatación, como el alcohol y los alimentos picantes.

EN RESUMEN: durante la transición de la primavera al verano es importante prestar especial atención al cuidado de la piel y el cabello, para prevenir y tratar los problemas comunes asociados con el aumento de la temperatura y la humedad.